La mezcla de estos dos colores, dorado y verde, es sinónimo de sofisticación, y es un acierto garantizado. Si a esto añadimos que combina elementos con la mesa, como centros, copas, platos, candelabros, etc con los tonos verdes y dorados del árbol, el resultado será siempre perfecto. También se pueden añadir algún otro color, como el rojo, una navidad que nunca pasará de moda y que tanto gusta.
Las velas en las mesas no pueden faltar, es un elemento imprescindible para dar calidez. Decora tu mesa con ellas para crear un ambiente especial en tus comidas y cenas.